Las vigas de hormigón son elementos estructurales que sirven para soportar las cargas de los forjados y transmitirlas a los pilares o muros de carga. Estas se fabrican con una mezcla de cemento, arena, grava y agua, y se refuerzan con barras de acero que les dan mayor resistencia y durabilidad. Las vigas de hormigón se pueden clasificar según su forma en vigas rectangulares, en T o en doble T.
La colocación de las vigas de hormigón en los hogares requiere seguir unos pasos previos, como el diseño del plano de ferralla, el armado de las vigas fuera de la planta y el transporte y colocación de las mismas sobre los apoyos. Además, hay que tener en cuenta el nivelado del encofrado, el hormigonado y el curado de las vigas.
Las razones para elegir las vigas de hormigón en los hogares son varias, como por ejemplo:
Son más económicas que las vigas de madera o de hierro.
Son más resistentes al fuego, a la humedad y a los agentes químicos.
Son más fáciles de adaptar a diferentes formas y dimensiones.
Son más estables y duraderas que las vigas de madera.
En esta ocasión mostramos la progresión semanal en una de nuestras Obras, en Barcelona.